LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL Y LOS DERECHOS DE AUTOR. RETOS PARA LA HUMANIDAD
Palabras clave:
Inteligencia Artificial, Propiedad Intelectual, Obra, Derecho de Autor, MetaversoResumen
La nueva política en la transición desde una sociedad industrial hacia una cultura informacional global nos provoca observar y dirigir una necesidad de seguir creando e innovando en todos los ámbitos para brindar mejoras a la humanidad respecto de las manifestaciones significativas en los últimos años y, es el salto tecnológico y las formas de apropiación de los recursos digitales, por ejemplo, el correo electrónico fue sustituido en gran medida por las redes sociales (Facebook, Twitter y otras) que permiten inmediatez en la difusión y debates online, así como también la utilización de YouTube que ofrece una enorme distribución.
Mientras que las formas de acceso a la red ya no son solamente desde una computadora sino también y de forma creciente, desde celulares inteligentes.
Así mismo, destacando a los derechos de autor, existe una imperiosa necesidad no solo de crear sino además de poder utilizar algunas otras herramientas actuales dentro de la inteligencia artificial que proponen una gran oportunidad para la creación intelectual. Sin duda estos creadores se han dedicado a proponer y mejorar el mundo de los derechos de autor, ya que, no puede permanecer ajeno a la profunda transformación que ha tenido la inteligencia artificial.
En algunas creaciones intelectuales se utilizan como apoyo frecuentemente aplicaciones o programas de inteligencia artificial, mismos que han provocado un cambio radical que generan a su vez una problemática respecto en dónde y a quién se debe reconocer la autoría de una obra.
Al vincular la obra protegida con el autor y al definir este como la persona natural que crea la obra, nuestro sistema de propiedad intelectual cierra la puerta a cualquier posibilidad de proteger con el derecho de autor, las obras creadas por sistemas de inteligencia artificial de forma autónoma o con una intervención humana mínima.
Otorgar un reconocimiento a las maquinas no parece compatible a los fundamentos de propiedad intelectual que protege el esfuerzo humano.